miércoles, 30 de abril de 2008

Frida y Frida



Ésta es una entrada difícil de escribir. No porque no me guste Frida Kahlo (1907-1954), sino porque toda su obra me apasiona, con lo que no sé dónde elegir (lo que los franceses llaman "l'embarras du choix").
Frida es compleja, simple, interesante, emocionante, personal, universal. Su obra refleja su vida, sus dolencias (provocadas por un accidente de autobús que le dejó la espina dorsal maltrecha), su tormentoso matrimonio con el artista Diego Rivera, sus ideales comunistas, sus ideales sobre la mujer, su tradición dual (europea-indígena).

La obra que os quiero mostrar hoy, Las dos Fridas, fue pintada en 1939 (hoy está en el Museo de Arte Moderno de México). En ella vemos la dualidad de Frida. Por un lado, está la Frida vestida de blanco, a la europea, con esa especie de gola que le cubre todo el cuello. Por el otro, la Frida indígena, vestida a la mejicana, con un medallón que lleva la imagen de su marido, Diego Rivera, en la mano.
Es una obra inquietante, surrealista. La Frida europea lleva unas delicadas tijeritas de plata con las que ha cortado parte de sus venas (¿tal vez mencione sus varios abortos? ¿o las infidelidades de su marido, entre otras, con su hermana Cristina?). Sin embargo, a pesar de esa doble cultura, las dos Fridas están unidas de corazón a corazón por esas inquietantes venitas que corren por su cuello y se enroscan en sus brazos. Una de ellas, que sale del corazón, parece una manita que quiere acariciarles las cara. Las dos Fridas son sólo una. Unidas por las manos y por la sangre.

En mi opinión, una de las mejores expresiones de la dual naturaleza de muchos lationamericanos.

Prometo más Frida Kahlo pronto. Mientras tanto, os recomiendo el libro de Taschen dedicado a Frida Kahlo: es muy interesante, está muy bien escrito, los dibujos son en color y, además, se encuentra en cualquier biblioteca (o en cualquier librería a muy buen precio). Aprovechad en la Feria del Libro más próxima. Es un regalo maravilloso.

La referencia completa es: Andrea Kettenman, Kahlo (Taschen, 1999).

martes, 29 de abril de 2008

Roth y la mancha del ser humano


Philip Roth es un genio. Y es el mejor escritor estadounidense vivo.

Así he decidido comenzar mi reseña después de leer "La mancha humana", publicada en 1998, en pleno escándalo Clinton-Lewinsky (¿recordáis?).
El protagonista, Coleman Silk, es un setentón profesor de latín y griego que hace un tonto comentario sobre dos estudiantes que no aparecen en clase. Éstos son negros y la broma es tomada por sus enemigos como un comportamiento racista. Silk tiene que abandonar la universidad. Y todo cambia...
No quiero desvelar mucho de la obra. Me parece fundamental que el lector descubra el secreto de Silk poco a poco, como propone Roth. Quiero comentar eso sí, algunos personajes:
-Faunia, la limpiadora analfabeta con la que Silk mantiene relaciones. Es un personaje complejo, muy interesante. Me gusta mucho cómo Roth hace que nos metamos en su mente. El concepto de la mancha humana es de ella.
-Delphine Roux. Una caricatura perfecta del mundo académico francés. Roth es despiadado con ella en pocas páginas. Eso sí, se graba, y el lector quiere saber más.
- Les. Uf. Nunca me había metido así en la piel de un soldado de Vietnam, pero uno de los que quiso volver. Da miedo pensar cómo hay gente que tiene tanta agresividad que la guerra es una forma de sacarla fuera. Y cómo la guerra destroza a las personas.

"La mancha humana" forma parte de lo que Roth llama su trilogía sobre la historia de EEUU del siglo XX, junto con "Pastoral americana" y "Me casé con un comunista". No he leído la primera, pero "La mancha humana" es mejor que la segunda, sin dudarlo.

"No puedes permitir que los grandes te impongan su intolerancia, del mismo modo que no puedes permitir que los pequeños se conviertan en un nosotros y te impongan su ética" (página 141).

Lo dicho, lectura fundamental y apasionante. Sobre el tema de la raza, la moralidad, el puritanismo, la vida. Engancha hasta tal punto que me terminé el libro en día y poco. No lo podía soltar.


Sobre Roth y su vida, podéis consultar esta entrada anterior del blog, aquí.
Gracias a Maba por la estrellita! Aquí la pongo para todas.